EL STRESS y sus consecuencias.
El stress mal llevado es el enemigo número uno de la salud; puede subirnos en una montaña rusa emocional, ser la causa de depresiones constantes y además, impactar en nuestra salud física, incrementando el riesgo de ataque al corazón, jaquecas, variaciones en el sueño y memoria. Y sin embargo, ¡muy pocos se dan cuenta de cuanto es que repercute en su salud dental!
Por lo tanto, como odontólogos es importante que tengamos siempre informados a nuestros pacientes respecto a estos temas, para que no descuiden la salud de su sonrisa. Debemos hablarles, por ejemplo de las 3 complicaciones dentales más recurrentes ligadas al stress:
Bruxismo (rechinamiento de dientes):
Si tus pacientes pasan por momentos con altos niveles de stress pueden provocarse un rechinamiento constante de dientes, sobre todo por las noches, o incluso llegar a apretarse la mandíbula. Nuestra labor entonces es aconsejar a nuestros pacientes sobre el uso de los protectores de dientes. El rechinamiento prolongado de dientes también puede desgastar el esmalte dental, ser causa de caries, sensibilidad, e incluso dañar la quijada.
Enfermedad Periodontal:
Los periodos prolongados de stress puede debilitar el sistema inmunológico. Cuando esto pasa, el cuerpo tiene muchos más problemas para luchar con bacterias, lo que lo hace mucho más susceptible a las infecciones tales como la de las encías.
Úlceras bucales:
Aunque no estamos seguros de cuál sea la causa exacta de esta enfermedad, uno de sus posibles activadores puedes ser el stress.
Lo ideal entonces es recomendarles a los pacientes a los que notemos pasando por malos momentos personales que sean cuidadosos con su salud dental, que cuiden su cepillado, que traten de comer alimentos saludables, que tomen agua constantemente, y que traten en lo posible de minimizar cualquiera de los impactos negativos que a largo plazo les puede dejar el stress.